Es a través de la oración que somos salvos, entramos a vida nueva, de bendición, nos hacemos parte de la familia de Dios.
En Mateo 6:9-13 Jesús y la Oración
9 Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
11 El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.
12 Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.
13 Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.
Jesucristo nos indica la forma de tener comunión con Dios. Todo lo que Él hizo, lo hizo para mostrarnos su amor por la
humanidad, indicándonos el Camino.
Con la oración, en el capítulo 6, verso del 9 al 13 del evangelio de Mateo nos enseña la forma de como hablarle, de transmitirle nuestro agradecimiento, la forma de alabarlo, de reconocer nuestra posición de hijos y Él nuestro Padre Celestial, que está en todo momento disponible aunque es el Padre de la Creación; que es tan importante para Él el corazón humillado y quebrantado que dice la escritura que no lo desprecia, Salmo 51:17; que es allí donde el atiende y escucha; nos muestra su ternura y bondad; permite que podamos disfrutar su presencia. Es en su presencia que se rompe todo yugo, opresión, cautivad; en su presencia hay libertad.
En el mover del Espíritu de Dios somos sanados tanto de enfermedades físicas como de enfermedades del alma; nos cambia y transforma con su fuego purificador, imparte dones, talentos, nos hace sensibles a su presencia, su amor invade nuestras vidas para transmitirlo a otras personas, su comunicación es de Espíritu a espíritu. La mano de Dios, se mueve a favor nuestro, en su presencia somos purificados y consolados, hay una verdadera sanidad.
A través de la oración hacemos conocer nuestras peticiones, rogativas, los anhelos de nuestro corazón, todo esto según la palabra de Dios, su voluntad; estas peticiones también se hacen a nivel congregacional, regional, de un país o un movimiento a nivel mundial.
La vida de oración de Jesucristo, su humildad y mansedumbre, la dependencia ante el Padre Celestial nos muestra la complacencia del corazón que agrada a Dios, la disposición de hacer la voluntad de quien le envió; se apartaba para entrar al lugar Santísimo y hallar la llenura del Espíritu Santo, el fuego y el poder de Dios, tener la capacidad, la unción del Altísimo, para realizar las proesas y milagros escritos en la Biblia en los años de su ministerio aquí en la tierra.
Lucas 11:1 Y aconteció que estando Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, le dijo uno de sus discípulos: Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó también a sus discípulos.
JESUCRISTO ora por sus discípulos
Juan 17
Santiago 5:15-16
15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados.
16 Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.
MOISÉS DAVID ABRAHAM JACOB ANA Éxodo 32:12-14 Génesis 24: 12-20 Génesis 32: 23-32 1 Samuel 1: 10-11 1 Samuel 2
rey JOSAFAT profeta ELÍAS LA IGLESIA JEREMÍAS
2 Crónicas 20: 6-25 1 Reyes 18: 42-46 Hechos 12: 5-19 Jeremías 19:18 al 23
DANIEL ISAÍAS Ezequiel Nehemías
Daniel 9 Isaías 63:15-16 Ezequiel 22:30-31 Nehemías 1: 1-11
Esdras
Esdras 10:44
1 Pedro 3:12 Porque los ojos del Señor Están sobre los justos, y sus oídos atentos a sus oraciones; pero el rostro del Señor está contra los que hacen el mal.
La oración es la vida del creyente, es tan importante, que Jesucristo, el Hijo de Dios y el Espíritu Santo continúan orando por todos los que han de ser salvos.
Romanos 8: 25-26-27
25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. 26 Y de la misma manera, también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; porque no sabemos orar como debiéramos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles; 27 y aquel que escudriña los corazones sabe cuál es el sentir del Espíritu, porque El intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios.